✨𝐇𝐈𝐒𝐓𝐎𝐑𝐈𝐀 𝐃𝐄 𝐓𝐀𝐋𝐄𝐍𝐓𝐎✨
Hoy queremos compartir la historia de Luis Mario González, uno de nuestros colaboradores más dedicados y ejemplares en la sucursal Hermosillo Reforma.
Con 24 años y una pasión por la gastronomía que ha marcado su vida, Luis Mario ha sido testigo de su propio crecimiento y de la oportunidad de avanzar en su carrera profesional gracias a su esfuerzo y a su compromiso con la excelencia.
Originario de Hermosillo y criado en la colonia Las Granjas junto a sus abuelos, Luis Mario siempre estuvo rodeado de valores como el trabajo en equipo, el esfuerzo y la responsabilidad.
Desde joven, estuvo muy cerca de la cocina, lo que despertó su amor por este mundo. A los 18 años comenzó su carrera como cocinero, trabajando en una empresa que se dedicaba a la preparación de desayunos, lo que fue su primer paso en el mundo gastronómico.
Sin embargo, fue en Mariscos El Rey donde Luis Mario encontró su verdadero lugar.
Hace dos años, vio una vacante en redes sociales y decidió postularse.
Desde su primer día, su pasión y sus habilidades fueron evidentes. Comenzó como ayudante, pero con su dedicación, rápidamente ascendió y, gracias a su esfuerzo constante, ahora es el encargado del área de desayunos en la sucursal.
Para él, uno de los logros más significativos ha sido precisamente este ascenso, que le ha permitido asumir más responsabilidades y demostrar su capacidad de liderazgo.
Luis Mario se siente orgulloso de la oportunidad de aprender de sus compañeros, quienes lo han apoyado en cada paso de su camino.
Su estilo de trabajo, que se caracteriza por ser rápido, limpio y en constante colaboración con su equipo, ha sido fundamental para su crecimiento dentro de la empresa.
“Cuando uno tiene la oportunidad de aprender y demostrar lo que sabe, el crecimiento viene solo”,
comenta. A lo largo de su tiempo en Mariscos El Rey, Luis Mario ha aprendido la importancia de la responsabilidad y el compañerismo.
Él se siente identificado con los valores de la empresa y aprecia que siempre haya un apoyo constante para todos los colaboradores. Es un ejemplo de que con pasión, esfuerzo y dedicación, cualquier meta se puede alcanzar.
Gracias, Luis Mario, por tu dedicación, por tu trabajo en equipo y por ser un ejemplo de superación. Estamos seguros de que seguirás alcanzando grandes logros en tu carrera y en la vida.
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(Tomada de RRSS)